miércoles, 17 de diciembre de 2014

ATLETI SOMOS NOSOTROS

El partido contra el Villarreal ha sido uno de los más tristes que he vivido en el Calderón. Y no fue por la derrota si no por el ambiente de guerra interna que se vivió en la grada.

Al principio del partido, todo el estadio menos la parte del Frente Atlético (¿se puede decir todavía Frente Atlético o me sancionarán?) entre otros cánticos, entonó aquello de "Atleti somos nosotros". Y acabando el partido, ya con el 0-1 en el marcador, fue el Frente el que devolvió el cántico de "Atleti somos nosotros". Y yo pienso que realmente:

El Atleti son mis dos hijas que desde la temporada pasada me acompañan (si el tiempo y el horario lo permiten) al Calderón y pueden decir orgullosas que todavía no lo han visto perder (el domingo no las llevé).

El Atleti es mi hija pequeña que el otro día, cuando su padrino (madridista confeso) le preguntó diciéndole "mírame a los ojos y dime, ¿de que equipo eres?" ella contestó "del Atleti" dejándole con un par de narices y a mi con la baba cayendo.

El Atleti es mi madre que, sin tener ni repajolera idea de fútbol, en todos los partidos enciende una vela a las estampas que tiene en su casa para dar suerte al equipo. Que me llama por teléfono para quejarse que en las noticias deportivas dan más importancia a cualquier cosa que le pase a Messi o Ronaldo que al resumen del partido del Atleti.

El Atleti es mi tío, que también me acompaña a todos los partidos. Que se indigna durante el encuentro por cosas que no entiendo y grita cosas sin sentido, que es de sonreír poco, pero que se emociona cuando todo el Calderón canta a capella el himno.

El Atleti son todos esos niños que, como mis hijas, llenan la grada familiar (y otras partes del campo) con sus camisetas y bufandas. Y que después de partidos como el del domingo, tienen que soportar a sus compañeros madridistas en el colegio.

El Atleti son todos esos seguidores que animan cada partido desde el tercer anfiteatro y que fueron los que nos contagiaron esta "enfermedad".

El Atleti son los voluntarios. Esos chavales que todos los días de partido están presentes por todo el estadio ayudando a que todo sea más fácil para todos y ayudando al club en todo lo que necesite.

El Atleti son esos jugadores como Juanfran, que llegaron sin hacer mucho ruido, siendo muy blancos y que ahora han abrazado la fe rojiblanca. O como Koke, que él perteneció siempre a esa fe y que el día que se ganó al madrid la copa del rey en su estadio, plantó una bandera del Atleti en medio del Bernabeu. O como Simeone, que ahora mismo es el máximo exponente de nuestra fe, el que nos ha devuelto a donde nos merecíamos.

El Atleti son todos los seguidores que llenan el Calderón todos los partidos. Esos que cantan mucho, los que cantan menos, los que protestan por todo, los que se van cinco minutos antes de que acabe el partido, los que se quedan hasta que la grada se vacía.

El Atleti son esos seguidores que viven fuera de Madrid y se recorren muchos kilómetros para ir todos los domingos al Calderón. Que montan peñas en sus ciudades o pueblos y que viven en minoría al lado de madridistas y culés.

El Atleti son esos seguidores de otros países que por una razón u otra se hicieron rojiblancos. Seguidores que viven lejos de España y tienen la ilusión de ir algún día al Calderón. Seguidores que montan peñas en los sitios mas insospechados y que a través de las redes sociales ves como hacen gala de su colchonerismo allá donde estén.

El Atleti son esos emigrantes que también viven lejos de su amado Calderón y que se levantan a horas intempestivas para no perderse ningún partido por muy poco interesante que sea.

Y sí, el Atleti son también todas esas personas del fondo sur que partido tras partido no dejan de animar. Que contagian al resto del estadio en sus cánticos. Los que hacen esos tifos que de los que nos sentimos orgullosos.  Esos que adaptan canciones al sentimiento atlético y que los demás estamos cantando durante días, ya sea en casa o en el trabajo.

Es decir, el Atleti somos todos estos (y alguno más que me dejaré en el tintero) pero todos por igual. Ninguno es más importante que el otro. La grandeza de estos últimos años es que todos hemos estado unidos remando en la misma dirección. Nada ni nadie puede estar por encima del Atleti,  por eso EL ATLETI SOMOS NOSOTROS, PERO TODOS NOSOTROS. Y por eso, necesitamos otra vez juntarnos para poder volver a estar cerca de repetir la hazaña de la temporada pasada. Como dice el maestro Rubén Uría, la afición del Atleti es lo único que no puede vender sus dirigentes.

PD: en mi humilde opinión, la gente durante el partido no pitaba al Frente, pitaba la actitud de este no desmarcándose de la pelea contra los seguidores del Dépor y sobre todo de la muerte del seguidor. La gente está harta de que asocien el nombre de su equipo a violencia, xenofobia, racismo, etc. Todos saben lo importante que es ese fondo para el Atleti y saben que la mayoría son gente que también está en contra de esos actos. Por eso esperan o esperaban un gesto condenando los hechos y diciendo a todo el mundo que ellos se dedican a animar.

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